En el puente de junio nos desplazamos al Valle de Tena para acometer las ascensiones de estos dos emblemáticos picos del Pirineo.
Midi d’Ossau
El sábado realizamos la ascensión de este pico por su vía clásica. Dejamos el coche en la vertiente francesa, al poco de pasar el puerto de Portalet, en un parking habilitado para ello. La actividad completa de ascensión y retorno nos llevó en torno a 10 h. La subida se inicia por una campa verde que en algo más de 1h y media te deja en el refugio de Pombie.
Desde este punto, la vista del pico y su forma piramidal es impresionante. Su color oscuro se debe a que se formó a partir de restos de magma de un antiguo volcán.
Tras preguntar al guarda del refu por el estado de las chimeneas, proseguimos nuestra ruta. Tras otro par de horas nos situamos en el coll de Suzón, donde se inicia la ascensión propiamente dicha, con las 3 famosas chimeneas.
Se supone que hay una chapa en recuerdo de un montañero fallecido próxima a la primera chimenea, pero nosotros no la vimos. Ninguna de ellas es difícil (grado máximo II+/III), y le dan un magnífico ambiente a la ascensión.
Tras superar la última chimenea que es la mas larga, se hizo necesario calzarse los crampones.
Desde este punto, en menos de 1 h se alcanza la cumbre de esta solitaria montaña, con unas vistas priivilegiadas del pirineo navarro (Anie, Mesa de los Tres Reyes, Acherito, …) y los primeros tresmiles del aragonés (Infiernos, Argualas,…).
En el descenso si es recomendable rapelar las tres chimeneas, estando perfectamente equipadas para ello con buenas reuniones.
El desnivel total acumulado de la ascensión es de unos 1.200 m.
Balaitus
Esta ascensión la hicimos en dos jornadas. En la primera salimos del Embalse de la Sarra, y recorrimos la senda que discurre paralela al río Aguas Limpias hasta llegar al Paso del Onso en 1 h y media, conocido por su gran peligrosidad por caida de aludes de nieve. Desde este punto, el camino se empina ligeramente, y en otra hora y media, alcanzamos el refugio de Respomuso, desde donde se divisan las piramides de los picos Gran Facha, Pico Campo Plano y Llena Cantal.
Al día siguiente partimos del refu, y tomamos la senda ascendente que se dirige directamente hacia el Balaitus por la brecha Latour.
En unas 2 h y media nos situamos en la entrada de la brecha, que tiene unos 80 metros y una inclinación de unos 45º. A destacar la impresionante Cresta del Diablo visible a la derecha durante la mayor parte de la ascensión hasta este punto.
La brecha estaba en muy buenas condiciones, totalmente cubierta de nieve y con buena huella para progresar sin ningún problema. En lugar de subir por las clavijas que hay a media altura de la brecha, optamos por llegar al collado superior de la brecha, y desde este punto hacer una corta travesía (grado III/IV) y una fácil ascensión (grado II) que nos lleva hasta una pequeña cima, desde donde se inicia la ascensión por el nevero final que te lleva a la cima en poco más de media hora.
En la cumbre del pico hay una pirámide metálica que estropea las vistas de la cima.
Ya solo nos resta bajar de vuelta al refugio, utiizando las dos reuniones equipadas para descender la arista paralela a la brecha Latour.
Ponemos fin a esta salida pirenaica disfrutando de unas merecidas cervezas en el chiringuito próximo al Embalse de la Sarra, antes de regresar a Madrid.